Noticias

una crisis silenciosa que afecta a más de 2 millones de argentinos

La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) es una afección respiratoria progresiva que limita el flujo de aire y provoca síntomas como tos persistente, dificultad para respirar y expectoración mucosa, constituye una de las principales causas de muerte en el mundo y en Argentina se estima que afecta a más de 2,3 millones de personas mayores de 40 años.

Sin embargo, según el estudio local más grande sobre esta enfermedad llevado adelante en nuestro país, el EPOC.ar1 , el 77% de los casos no está diagnosticado, lo que convierte a la EPOC en una crisis silenciosa de salud pública. Esta es una de las claves del nuevo informe desarrollado por la Respiratory Health Initiative, una plataforma global -dependiente del Copenhagen Institute for Futures Studies (CIFS)- que analiza las capacidades nacionales para enfrentar enfermedades respiratorias crónicas.

Este miércoles se conmemora el Día Mundial de la EPOC y, en el citado informe se observa que, si bien el país cuenta con una base epidemiológica sólida y guías clínicas actualizadas, enfrenta serios desafíos en la implementación sistemática de políticas, el acceso equitativo y la integración de los distintos subsectores del sistema de salud.

“Tenemos centros de referencia y programas de rehabilitación pulmonar de excelencia, pero el acceso sigue concentrado en grandes ciudades. El subdiagnóstico es alarmante: la mayoría de los pacientes llega tarde a la consulta, cuando la enfermedad ya está avanzada”, advirtió el Dr. Alejandro Salvado, jefe de Neumonología del Hospital Británico de Buenos Aires.

Según el informe, la espirometría -prueba sencilla, ágil, indolora, económica y clave para detectar EPOC– no está disponible de manera sistemática en el primer nivel de atención y esto impide la detección temprana y contribuye a que seis de cada diez diagnósticos sean erróneos, tal como se vio en el EPOC.ar.1

Además, el escrito manifiesta que la fragmentación del sistema de salud entre sectores público, privado y de seguridad social acentúa las profundas inequidades: mientras hospitales de referencia concentran la atención especializada, vastas zonas rurales del país carecen de servicios básicos de diagnóstico y rehabilitación, aunque esta problemática no se restringe a zonas alejadas; hospitales públicos en zonas urbanas a veces no tienen médicos neumonólogos y/o espirómetros.

“El paciente con EPOC requiere educación para la adecuada administración del tratamiento, acompañamiento en la cesación tabáquica y seguimiento continuo. La adherencia al tratamiento es fundamental, pero solo un tercio de los pacientes lo cumple adecuadamente”, señaló la Dra. Ana María Stok, médica neumonóloga, Directora Médica de Investigaciones en Patologías Respiratorias en Tucumán.

Un llamado a la acción

Entre las recomendaciones del informe para Argentina se destacan la de la creación de un Programa Nacional de EPOC, con presupuesto propio, la implementación de un tamizaje sistemático a través de espirometrías en poblaciones de riesgo y la integración de la enfermedad al Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud para contar con un registro actualizado. Propone descentralizar la rehabilitación pulmonar, fortalecer los programas de cesación tabáquica y garantizar el acceso equitativo a tratamientos de acción prolongada.

El documento subraya además que el 35% de la población argentina continúa fumando, y otro 35% está integrado por ex fumadores, lo que mantiene un alto nivel de exposición al principal factor de riesgo. A ello se suman los efectos de las partículas del ambiente en áreas metropolitanas y del uso de biomasa en zonas rurales, que agravan la carga de enfermedad respiratoria.

“Todas las medidas que podamos tomar para mejorar el acceso al diagnóstico y al tratamiento de la EPOC son importantes porque las personas con sintomatología respiratoria que empiecen a recibir el tratamiento adecuado para el grado de severidad de su cuadro podrían vivir significativamente mejor y evitar que esta enfermedad impacte en su trabajo, en su descanso nocturno, en su vida social o en su capacidad de caminar tres cuadras o de subir unos escalones, entre otras situaciones habituales”, puntualizaron los especialistas.

Las recomendaciones para Argentina son:

  1. Crear un Programa Nacional de EPOC.
  2. Implementar un tamizaje espirométrico sistemático.
  3. Establecer un registro nacional de EPOC.
  4. Garantizar el acceso equitativo a tratamientos.
  5. Descentralizar y expandir la rehabilitación pulmonar.
  6. Fortalecer los programas de cesación tabáquica.
  7. Actualizar periódicamente los estudios epidemiológicos.
  8. Integrar la prevención ambiental y ocupacional.

«Además de entender cómo está Argentina hoy, este trabajo busca ofrecer una visión sobre qué capacidades debe fortalecer el país para enfrentar los desafíos respiratorios de la próxima década», concluyó el informe.

Fuente: NA

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba